“La traición de Facundo Moyano nos hizo perder dos años”

C.A.B.A., Argentina, UNASUR-CELAC, EL EMILIO

Este jueves 14, la regional La Plata, Berisso y Ensenada de la Juventud Sindical (JS) realizó un plenario y acto de renovación de autoridades. Esto sirvió para hacer un balance del espacio y su proyección en el marco de un año electoral.

Congreso de la JS

 

Por José Cornejo

El plenario y acto de cierre se realizó en el Teatro Municipal de Ensenada y tuvo como anfitriones al intendente local, Mario Secco y el apoyo de las dos CGTs platenses. Leandro Ciriaco, del sindicato de Obras Sanitarias (SOSBA), último titular de la JS, cedió su lugar al petrolero Nahuel Chancel (SUPEH).

El acto de cierre tuvo discursos emotivos y acalorados. Secco recordó la situación de Ensenada en los 90, pueblo obrero que sufrió con crudeza las políticas del menemismo y el delarruismo. El intendente recordó los ensenadazos, guisos populares que él mismo promovía. Lo continuó Ramón Garaza, que no pudo evitar lagrimear cuando recordó la privatización de YPF y cómo lo habían echado. En la misma línea expuso Julio Castro, de SOSBA. Castro hizo hincapié en las venideras elecciones presidenciales y la importancia de ganarlas. Rafael Barbarulo, adjunto de UPCN bonaerense, también destacó la necesidad de imponerse en los comicios, “aunque tengamos matices con el gobierno, como es el impuesto a las ganancias”.

Todos los oradores tuvieron un párrafo sobre el salto a la política, de la que Secco, ex municipal, era el blanco de todos los elogios. Garaza es precandidato a intendentes de Berisso, y su iniciativa fue comparada con la de Omar Curto en Tres de Febrero y el Barba Gutiérrez en Quilmes.

Lo discursos más encendidos los dieron el secretario general de la JS nacional, Hernán Escudero y el novel dirigente Chancel. Escudero festejó el traspaso de autoridades, “que confirma que esta es una construcción colectiva y no en función del beneficio de uno solo”. Luego se refirió con sorna a Facundo Moyano. Sin mencionarlo recordó a aquel “que primero iba a ser gobernador bonaerense de Massa, después ministro de Trabajo, después secretario de Transporte y hoy mendiga por renovar su banca de diputado”. A modo de cierre, agradeció el acompañamiento de los secretarios generales, “lo que demuestra que en los gremios existe mucho juego para desarrollar iniciativas como esta”. Chancel no fue menos crítico del hijo menor de Hugo. “La traición de Facundo Moyano nos hizo perder dos años, pero acá seguimos, trabajando, creciendo”.

La defección del más chico de los Moyano, paradójicamente, está funcionando como un fortalecedor de la identidad del espacio.

 

1 Responses to “La traición de Facundo Moyano nos hizo perder dos años”

  1. Marcelo dice:

    Adelante muchachos !…. Sobre Facundo hay poco que agregar. No tiene historia con la que tirarle nada por el mate . Es solamente el hijo de un dirigente degradado y ciego que supo tener mejores días al lado de sus representados y de los trabajadores resistiendo la ola neoliberal y acompañando al gobierno popular. Nada nuevo. También lo fueron el Lobo y Pedraza en su momento, hasta que se rindieron al enemigo y se pasaron de bando.
    Lo cierto es que cada vez que la rama sindical avanzo sobre la política sin medir los costos, la realidad -igual que el éxito- le ha sido esquiva.
    Esto no es algo que nos deba alegrar, sobre todo porque la sombra de la traición, el desprestigio y la comidilla gorila recae (nada menos) que sobre la organización que garantiza los derechos luchados, bien ganados e instituidos de todos los trabajadores.
    Es triste ver a estos chingolitos habitar la casa de los trabajadores después de comer en la mesa del enemigo y más triste aún, es verlos contar y recontar (sin rastro de rubor), los cuatro votos que sacaron allí donde se presentaron.
    En un acuerdo de cúpulas, podrán parar la capital o forzar la perdida de unos miles de puestos de trabajo para generar desazón junto a la oligarquía, pero aunque su capacidad de daño aún sea enorme, no les da el talle para cambiar la historia.
    ¿Qué más se puede decir de éstos dirigentes degradados con pasado luchador y de sus «pollos»?
    Tendrán su lugar y el juicio político de la historia en su momento. Ahora es momento de luchar, al menos, para no retroceder en lo que tanto sacrificio ha costado arrancarle al enemigo. Vamos pibes, a garantizar cada voto para el gobierno popular que seguramete saldrá en Octubre, con conciencia y militancia que es lo que a los jóvenes de esta etapa les sobra. Reciban un abrazón desde Rosario todos los compañeros de la JSP y no gasten pólvora en chimangos. .

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